Erase que se era, un hombre que vivía en el bolsillo de su mujer.
Se había consumido de amor.
Se le ocurrió al poco de casarse, no cabía en si de gozo, !Qué feliz era!
Su esposa le daba tanta ternura,... tanto amor,... le trataba con tanta dulzura
que se fué quedando "chiquitito" de "gustito", y su esposa lo llevaba en el bolsillo para no perderlo nunca.
Pilartxo
12 de mayo de 2010
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